jueves, 26 de noviembre de 2015

Brisa

Salir a dar una vuelta
escaparse de la rutina
del círculo de confort
de uno mismo.
Hay que perderse para encontrarse, 
no?

Salir a pasear,
con los ojos abiertos, 
el corazón dispuesto, 
la cámara en mano y
la mente en blanco.

Buscando encontrar la belleza de todo lo que nos rodea.
Buscando


El Fitz, tirando facha

contraluz


siguiendo la luna


amar las piedras y sus patrones naturales


trama etérea

Champa: Amor animal. Me hace recordar lo hermoso que es
tener un perro, y lo mucho que extraño al mio.










sábado, 21 de noviembre de 2015

cosas que uno lee por ahi y esta bueno recordar

Hate is a learned behavior.
Love is natural


miércoles, 18 de noviembre de 2015

*

"Para poder vivir con otras personas tengo que poder vivir conmigo mismo. La única cosa que no se rige por la regla de la mayoría es la conciencia de uno"

Atticus Finch

sábado, 14 de noviembre de 2015

Sopla

Ruge el viento
mueve los árboles, 
sacude a la lluvia,
despeina el pelo
y hace temblar hasta a la pared más maciza
y a las de cartón ni te cuento...

Escucho coplas que nunca escuche, algunas me sacuden a mi tambien, como el viento a la lluvia.
Y escucho otras que ya conocia, y también me sacuden.
En conclusión, estoy sacudida, bah.

Y en parte es el viento, y en parte no.
En parte es que una parte de mi se quedó allá, con mi familia, con mis amigos, con mis mil chucherías inservibles que solo sirven para hacerme sentir en casa y recordarme quién soy y qué fue de mi todos estos años.
Acá no tengo historia, acá me reinvento todos los días, puedo jugar en idiomas, hacer café como si supiese y sonreir cuando me dicen que les gusta mi nombre. Soy parte de una parte de ese viaje de los otros.
Pero la otra parte, la mía, está sacudida.
Me cuesta encontrarme sin mi gente.

Me sorprendo de la capacidad que tenemos los hombres de reinventarnos y empezar de nuevo, o no de nuevo, pero si diferente. De ser otros, de cambiar de paisaje y de comida, y de trabajo y de ropa y de clima. Pero aún así, aún cambiando de ropa y hasta de piel, no se puede cambiar la sangre ni la esencia.
Soy una sedentaria entre muchos nómades, y mi vida es rara frente a la de todo el resto. Mis horarios de oficina le causan risa a todos y creen fervientemente que buenos aires es la ciudad de la furia, solo porque un día a Cerati se le ocurrió escribir una canción. Y me doy cuenta de que todos somos un poco ciegos y bastante prejuiciosos. Porque los de allá miran a los de acá como hippies, y los de acá miran a los de allá como yuppies. Y nadie le da un cuarto de crédito al que es un poco de todo, pero nada de todo.

De a poco y con tiempo seguro que el viento va a soplar más suave, o al menos me voy a acostumbrar, y quizás ya no me sacuda tanto sino que me acaricie y me haga bailar, y me haga amigos y pueda enriquecerme de las diferencias con el resto.

Pero mientras tanto, cómo sopla el viento che.




"Abre las hojas del viento mi vida
ponle una montura al rio
cabalga y si te da frio te arropas
con la piel de las estrellas"

Amapola